formado por Roberto Flores (guitarrista) y Javier Roncal (guitarrista y cantante)
hacia verano de 1994 y que no llegó a tener un baterista ni un bajista fijo.
Cuando tenían varias canciones bastante concretadas decidieron grabar una maqueta
donde algunos de los temas quedarían fuera de la grabación.
Javier tenía 16 y Roberto 17 aunque en verdad casi dos años les separaban y no hacía mucho que se conocían.
Un encuentro casual les convenció de que podían hacer algo juntos existiendo las ganas en Roberto
de crear y tocar como guitarra solista y el potencial que él vio en Javier como creador de canciones rockeras y cantante.
Javier entonces era un heavy de pura cepa amante de los Barón y aceptó encantado aunque no pudiera verse
a sí mismo ni en sueños como cantante heavy y no tenía ni idea de tocar la guitarra eléctrica
ni le interesaba en verdad.Él era y ha sido siempre acústico.
El grupo fue muy difícil de crear y mantener. Suerte que con la motivación a esas edades se rompen muchas barreras
a base de cabezonería y se conseguía lo que se necesitaba casi siempre, de un modo u otro,
respecto a material o lo que fuese. Sin esa fijación obstinada en lograr hacer lo que fuese con la banda
no hubiera sido posible que en muy poco tiempo llegasen a componer y grabar, en 1995, ésta maqueta.
Para ella encontraron en Fernando Pérez a la persona con los conocimientos y el material suficientes para grabarles,
en su propia habitación, éstas cuatro canciones previo pago de 20.000 pesetas.
Quedó la duda de si con más dinero hubiera accedido a grabarle las demás canciones al grupo
o si más bien les hacía el favor de soportar algo que no era de su agrado pues Fernando no era muy simpatizante del rock rural.
A pesar de ser aun muy joven también, él ya conocía de técnica y teoría poseyendo buena experiencia guitarrística
y profundizando en el Blues del más profundo Missisippi. Sin duda era el joven músico de aquel entorno
que más alejado estaba de la superficie callejera del barriobajero rock rural de los escasos grupos
que en Ejea se atrevían a crear Rock “en minoría de edad”. Rock en pañales.
Digamos que estas cosas ya formarían parte de una historia mucho más detallada y adyacente o alejada
de la breve historia de aquel grupo que fue PROFECÍA. Y por si a alguien le interesase,
el nombre procedía de una canción que un compañero de clase de Javier en 4º de la ESO
había compuesto en ese mismo año en que se grabó la maqueta. Aquella canción era toda una declaración de principios
de los fundamentos del Heavy ubicados en un imaginario lugar llamado así, Profecía, donde el heavy jamás se podría extinguir.
Javier nunca entendió por qué su compañero y autor de la canción, también músico, siempre se negó a trabajar en grupo
aquella y otras canciones, más aun cuando coincidieron años después en el grupo PLASTICO.
No obstante da lo mismo pues Javier en verdad hay muchas cosas que nunca entendió en todos esos años.
No se entienda mal esto último pues Javier manifiesta hoy en día, y desde hace tiempo,
ser muy capaz de entender aquellas pequeñas cosas y totalmente seguro de haber entendido las que no fueron pequeñas.
Como dije PROFECIA sólo dio un concierto y fue en 1994 durante unas jornadas juveniles en un pueblo pedáneo de Ejea.
No había bajista y la batería corrió a cargo de un baterista y también bajista apodado “Caracol”.
que poco después abandonó el grupo aunque ya tenía tras de sí algo de camino en las lides de rock ejeano
y por tanto experiencia en cuanto a bandas y conciertos. Cosas_en_las_que_Roberto_y_Javier_eran_debutantes.
Las guitarras fueron grabadas por Roberto Flores pues Javier, a pesar de ser autor de las canciones,
apenas acababa de empezar a aprender a tocar y con la guitarra eléctrica sólo empezaba a “trastear” algo e incitado por Roberto.
Así pues la maqueta fue un proyecto más lleno de entusiasmo que de experiencia: Una explosión de furor adolescente
por el alto voltaje, el volumen brutal y el derroche de decibelios.
Al final de la maqueta aparece un corte de aquel único concierto del 94.
Media canción de cómo fue creada originalmente “Huérfano de la vida”. En principio la canción duraba más de 10 minutos.
Se conservó por la grabación de video en una cámara de Super 8 que luego Javier captó poniendo el radiocasete
frente al televisor y de ahí su mala calidad. Al final se oye unos segundos de breve instrumental
que PROFECÍA tenía en proceso de desarrollo a partir de una idea de Roberto y que junto a “Huérfano de la vida”
era en aquellos inicios todo el repertorio del grupo. Fue la primera actuación en vivo de los integrantes del grupo.
La primera en la vida. Luego vendrían más pero eso es otra historia y deberá ser contada en otra ocasión.
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